Héctor López es la cabeza visible del equipo de este centenario restaurante lugués.
El España se encuentra dentro de las murallas patrimonio de la humanidad.
Recuerdo que al ojear la página web del restaurante no sentí un especial entusiasmo, respecto a lo que me iba a encontrar; dulce desengaño me llevé.
El local posee una fachada clásica que no desentona con su entorno; no llama demasiado la atención, pero viene a advertir algo bueno. Al entrar, se pasa por un luminoso hall y se accede a lo que sería el bajo donde se ubica una cafetería de tamaño considerable; dotada de una enorme barra y un número importante de mesas dispuestas de un modo bastante espartano.
El restaurante en sí está en la primera planta a la cual se accede subiendo unas escaleras desde el interior de la cafetería. El tono que se percibe por la disposición y la deco, es el de clásico convenientemente renovado, carente de estridencias y con acabados de gran calidad.
Curiosamente; pese a lo dado que soy a las cenas, de las tres veces que comí en el España, siempre lo hice en horario de comida; me quedo por tanto sin saber como será la iluminación nocturna ya que por el día la sala dispone de abundante luz natural; predominando además los tonos claros, resulta bastante luminosa.
Las sillas son cómodas; las vistas a la cocina se observan a través de dos ventanucos y la bodega se encuentra a la vista; ¡ojo, con referencias que no aparecen en carta!. Recomiendo consultar precios en estos casos.
El servicio resulta bastante amable y disponen de un sumiller dispuesto a la comunicación para ayudar y a resolver ciertas dudas. Mi opinión del servicio de este restaurante es bastante redonda; aunque debo decir que en la última ocasión patinaron bastante. Debo entonar algo de mea culpa; pues recuerdo haber llegado pasadas las 15:30 y para disfrutar de un menú degustación (si se hubiesen negado a servirlo, habría pedido por carta sin problema). Me faltan dedos para contar las personas que me atendieron.
De todos modos, quede claro que no estoy diciendo que el servicio tan apurado que recibí en esa ocasión en concreto; sea lo habitual.
Mi toma en contacto con la carta resultó bastante positiva. Ni demasiado extensa, ni demasiado tradicional, ni demasiado arriesgada, ni demasiado cara; eso si, buena selección.
En la carta de vinos encontramos muchas D.O. diferentes; sin demasiado sobreprecio. Sobre todo teniendo en cuenta el correcto servicio; aunque me han comentado que la cristalería que se utiliza para espumosos (champagnes y cavas) no alcanza el nivel del resto.
El pan del que disponían ese día era de tres tipos a elegir; maíz con pasas, tetilla e integral. Detalle este de ofrecer varios tipos de pan; que me encanta y que se debería extender como costumbre en restaurantes con propuestas de nivel.
Para beber elegí un Petrea (D.O. Penedés); ¡bien por mi!, acompañó a los platos de maravilla. Es un vino profundo, equilibrado, sin demasiada madera y espectacular en si mismo.
Vamos con la pitanza; tras haber elegido un entrante y un segundo llegó a la mesa un fabuloso aperitivo. Se trataba de una brandada de bacalao con espuma de tomate; impecable presentación en chupito alto y de sabores extenuadamente puros.
(Observareis que me acordé de sacar la foto cuando ya había engullido la mitad)
Como entrante me sirvieron en pizarra un tartar de atún toro. Exquisito de sabor y fresco. Picado a cuchillo, evidenciando un corte harmónico para todos los ingredientes; como debe de ser .
Mi elección para el segundo plato fue el magret de pato con frutos rojos. Este plato goza, como dirían LOS DILETANTES, de una estupenda RCCP. O lo que es lo mismo; producto de calidad, con combinación de sabores óptima (con una guarnición de finísima patatas paja), perfecto de punto y en otros sitios serían dos raciones. Quiero hacer incapié en esto último, por que si, era mucha carne, pero la mitad sería muy poca Y NO ES PLAN.
Puede resultar llano este comentario, pero me recordó la provincia en la que me hallaba.
Tras este plato, estaba lleno, lo reconozco; pero aún con ansias de ver que tal estaban los postres y elegí un dos en uno. No es que pidiese que me fusionasen dos postres, pero tratándose se un soufle de chocolate con un helado de nata y fresas asadas; ¿que queréis que os diga?. En algunos restaurantes llaman al coulan, "bizcocho de chocolate en dos texturas".
Así que me encontré con un postre muy completo con una acertada combinación de sabores, al soufflé le tienen pillado el punto y un juego entre texturas y temperaturas al que siempre apetece jugar. Acompañé el mismo con una copa de digestivo P X.
LLegada la hora del café, este vino acompañado de unos completísimos pettit fours; dos finas tejas, una de ellas de pistacho y una trufa.
Por último no puedo dejar de comentar la amabilidad y la atención que me dispensó el servicio en esta ocasión. La verdad que me hicieron sentir muy cómodo resolviendo ciertas dudas, prestándome la ayuda necesaria e intercambiando impresiones tras finalizar la comida.
LA CUENTA:
Pan 0,90
Tartar de atún 10,80
Magret de pato 15,00
Agua 1,60
Petrea 33.00
Soufflé 4,40
Pedro Ximenez 3,50 TOTAL: 74.04
Yo no sé si es que te paga la empresa las comidas o qué pero me parece exagerado una botella de vino entera cuando vas tú solo, ya no solo por el precio si no porque es imposible de acabar. Pagar 75€ por eso que comiste me parece una barbaridad, yo me tomaría una copa y listo. Aunque si tienes dinero haces bien, así ayudas a superar la crisis
ResponderEliminarAnónimo, están los bancos llenos de dinero, aunque no del mio. Creo que no será necesario decir en que me lo gasto.
ResponderEliminarNo se hasta que punto está bonito hablar de mi dinero en este blog; pero para saciar tu curiosidad, trataré de aliviar tus dudas:
La empresa en la que trabajo desde hace poco más de un año me paga 12 euros de dieta de lunes a jueves; hasta entrar en ella, me pagaban 0 y tenía que comer fuera prácticamente todos los días. Mi sueldo base actual no es ni 100 euros mayor que mi antiguo sueldo, el cual no llegaba a 1.000 euros. Por cierto las horas extras (que me obligaban a hacer para no irme a la calle)las cobraba "el inglés".
A la comida no me invitan ni en Navidad.
Responderé ahora la que posiblemente será tu siguiente pregunta.
La gastronomía es hasta el momento y obviando un par de años en los que se me dió por el deporte, mi vicio más sano y sustituto de otros no tan gratificantes.
Tengo una receta que le valdría a la mayoría de la gente; no te la voy a dar por que como podrás observar leyendo en el blog, me da bastante pereza. Pero a ver que adivinas con estas pistas:
-Suelo llegar a los restaurantes en un corsa de 11 años que da pena mirar para él. No duermo en hoteles caros, salvo rarísima excepción.
-No tengo moto, no juego al golf, no soy aficionado a la caza ni a la pesca y sí a recoger setas en otoño (actividad bastante económica y saludable).
-No tengo nigún inmueble en propiedad (comparto vivienda desde los 24 años); por que temo morir sin haberlo pagado y sobre todo a vivir condicionado por mis posesiones.
-Me encanta comer y beber; los platos por lo normal se vacían y las botellas quedan temblando cuando no agotadas (si voy acompañado, depende de lo malo/a que sea mi acompañante puede llegar y sobrar una botella para dos o acabar bebiendo más de una per cápita). En caso de que se queden por la mitad, bien sea por un menú corto, falta de sed, o miedo a que me quiten el carné en caso de tener que conducir, me las llevo para casita.
¿Vas pillando?
Mi método, como casi todos,hace aguas y el día de mañana me puedo ver en el arroyo (al igual que importantes abogados que cobran mi sueldo multiplicado por diez); pero podré consolarme con el recuerdo de haber disfrutado y presumir de mi altruista,al tiempo que hedonista,aportación para salvar la crisis ;)
Ahora que has brindado la oportunidad de poner encima de la mesa mi way of life, quizás prefieras en venideras ocasiones que se hable de comer...
Un saludo y gracias por pasarte.
Daniland
ResponderEliminarEn primer lugar gracias por seguir nuestro comestible blog...gracias a eso he descubierto tu blog.
En segundo lugar, enhorabuena por tu contestación anterior, yo pienso IGUAL QUE TU , mi Matiz de hace 5 años me costo 7800 euros en comodos plazos , pero este mes de febrero me he ido a comer a Moustiers Sant Mari , al hotelito restaurante de Alain Ducasse , y disfrutamos una semana de execelente cocina , setas en el monte , quesos de Valensole de los artesanos de la zona y de la increible reposteria francesa en los desayunos, y que yogures naturales hechos por los queseros del lugar ¡¡¡impresionante¡¡¡
Añadir al "iluminado anterior" que el gramo de cocaina en el mercado negro anda por el precio que tu pagaste en este restaurante, y eso si que es lamentable , que por una mierda quimica adulterada, pagar esa cantidad , y ademas las copas, el coche "tuneado" caro para derrapar y demas compañias , eso si que es CARO , si CARO.
Parece que hablar de buenos vinos , buena cocina , lugares con encanto etc... es de "finos" , "sibaritas" o "pijos" , sin embargo meterse coca , beber en bares cutres llenos de humo polvos quimicos en forma liquida , a los que le llaman "Vinos" , insultando a los que hacen VINO DE VERDAD , y metiendose comida de fritanga , con aceites poco saludables , y congelados del Xacobeo anterior (creo que el 2003), eso si que esta de puta madre¡¡ vamos , que le vamos a hacer. NADA.
Por cierto , decir que CASA PENDAS es de mis sitios preferidos de Ferrolterra, y que tanto Alfonso como Sonia son ENCANTADORES, siempre nos han hecho sentir de puta madre en su casa, y la camarera que lleva con ellos desde la apertura,(no me acuerdo el nombre) es muy profesional y otro encanto de mujer , muy agradable .
Que sigas igual , NO CAMBIES tus placeres, cuando pasen los años verás que ha merecido la pena , y te reirás de los que beben "CALIMOCHOS",
Un saludo comestible
CALIMOCHO DE CONTADOR ...jaja
A Casa de Comestibles:
ResponderEliminarRuego no tomeis esto como un peloteo vacío, pero no sabéis hasta que punto me siento honrrado con contar con vuestra participación.
Permitid por tanto advertios de que tras haberos visitado a los cuatro días de haber abierto, publique mi experiencia en CDC cuando finalice el "Ciclo Nove".
Como leo tu blog y el de unos cuantos más (creo que para esto tambien debemos ser selectos) se que los profesionales estais un pelín quemados con los "lambepucheros" como yo ;)Pero yo trato de transmitir mi pasión como buenamente puedo y creo que proyectos como el que habéis llevado a cabo merecen la pena ser conocidos y contados.
Por cierto, agradezco al señor Jordán la recomendación de Pedro Roca y no sólo por esa "empanada descubierta" si no por el EXCELENTE trato que me dispensaron; ¡eso sí es calidad!
Degusto vuestro saludo. Eso si, con Predicador que últimamente el exceso gastronómico me ha dejado más seco que la mojama... je je
Soy el primer anónimo y quería comentar que me parece de muy mal gusto el comentario de "casadecomestibles", local que tenía pensado visitar pero visto el percal se me han quitado las ganas. La comparación con el precio de un gramo de coca me parece de una simpleza tremenda de no venir a cuento y de alguien sin argumentos.
ResponderEliminarY si hubiera leído lo que escribí vería que en ningún momento critico que te gastes en comer lo que quieras. Yo también soy gran fan de la gastronomía y no me duele lo más mínimo gastarme 100€ en una cena memorable. Lo único que comentaba es que me parece excesivo pagar 40€ por el vino cuando es una sola persona a beber, pero solo es una opinión. Y si como dices vas en coche a los restaurantes dime tú si es saludable que lo cojas después de una botella entera para tí solo. Me encanta el vino pero si no lo comparto o si conduzco prefiero un vaso.
Y es solo una opinión, no pretendo sentar cátedra pero que me tache de "iluminado" alquien por exponerla creo que es de mala educación. Y eso es lo primero siempre, piense como piense el otro.
Anónimo; no debes tomarte a mal las manifestaciones de CDC; con las que estoy de acuerdo; al igual que con las tuyas.
ResponderEliminarSi relees lo dicho, verás que no estoy cayendo en una diplomacia vacía. Es cierto, yo no te quito razón; pero no otorgo a nadie el poder de decir en que o cuanto de que debo gastar mi dinero. Ni a mi señora madre; a la que tengo que comparecer por haber tenido como hijo a un descerebrado como yo; pero a la cual tampoco le doy el placer de que me vea ahorrando.
Conducir borracho no es para nada un acto saludable. Aunque te parezca mentira lo hago poquísimas veces y en la ocasión que nos ocupa, no bebí ni la mitad de la botella. Lo cual para mi no es como beber nada, pero tampoco voy peor que bebiendo una sola copa.
No te miento;la botella la rematé en casa con la ayuda de unos amigos; es mas cuelgo la foto em mi Facebook (DANIEL CARBALLEIRA GARRIDO) en pro de dar buen ejemplo en cuanto al cumplimiento de las normas de circulación.
En cuanto a lo de desestimar tu visita a Casa de Comestibles; no te flageles, no te hagas daño; ve y disfrutarás. Las palabras de CDC encierran sabiduría, socarronería y retranca a partes iguales. Humor e ironía como él ha dicho recientemente.
Por cierto; como veo que te preocupas por mi salud; ¿que te parece que me haya jugado el tipo delante de las fieras celtas del penúltimo post?
Te reto a que te leas la chapada que largué sobre Casa Marcelo y eso que traté de resumir; ja ja ja
Saudos xente.