viernes, 25 de noviembre de 2011

Dos párrafos...

... para felicitar a los restaurantes gallegos,  reconocidos por primera vez, o de nuevo; por la popular guía roja y para recordar a los lectores que las sensaciones transmitidas por los aficionados más humildes, pueden ser igual de válidas. Si no más...
ESCALERAS 1*

Carta de vinos completa y mejorada desde mi primera visita STOP referencias a buen precio, con copas de calidad para su disfrute STOP carta amplísima, con disponibilidad de dos menús, uno largo y otro más largo, que es el que yo tomé, a 48 € + I.V.A. (ojito con esto último) STOP sala amplia, luminosa, estancia exclusiva para digestivos, buen servicio, invitación al café STOP así da gusto STOP 

Restaurante Silabario en Tui; NIVELÓN.

(...) de manos de Marcelo y su gente, he disfrutado de las más atrevidas, innovadoras, sorprendentes y audaces creaciones culinarias. Platos con calado, dotados de una enorme profundidad, casi siempre complejos y en ocasiones de pasmosa sencillez, alegraron mi paladar y enriquecieron mi escaso saber gastronómico, de la manera más divertida posible; sentado a la mesa de un gran restaurante.
Siempre hay un giro de tuerca en Casa Marcelo, evolutivos giros inesperados que quedan impresos en la memoria del comensal.  
 ....................

Y remato con un mensaje marca de la casa; + disfrutar y - joder al prójimo.  Quienes no sean capaces de hacer lo primero; que no dejen de practicar lo segundo (sin olvidarse nunca del - ).
ESCALERAS 2*
*O de que cada uno juegal al piedra/papel/tijera, como le da la gana.

martes, 22 de noviembre de 2011

Vino Castillo de Perelada MALAVEÏNA

... o de un sorpresón de lo más agradable, que me llevé cenando, en mi anterior visita al restaurante  Pedro Roca.

El caso es que me había olvidado de incluirlo en su correspondiente entrada y he tardado tanto en escribir mis sensaciones sobre el vino en si, que hasta se me ha borrado de la memoria el año. 
No es de extrañar, teniendo en cuenta que he recuperado con demasiadas ansias -y por lo grande, además- la costumbre de beber prácticamente a diario. Se me vienen a la cabeza un fastuoso Valtravieso del '94, un par de Valtuille (B. Castro Ventosa) '06 y '05, un B R U T A L Gneis del '98, un CONTADOR '07 que no me permitirá ir al cielo tras su degustación, un HIPPERIA '05, que, como siempre, ha estado mundial y un CHATEAU RAYMOND-LAFON '06, en versión 375 ml. con el que acabo de dar buena cuenta, de un foie Mi-Cuit casero -mezcla perversa, lo se-. Todos ellos, entre muchos otros, con armanags, los mejores vermouths del mundo mundial -en O Gaiteiro, no me canso de decirlo-, brandys y hasta en los gin tonics he vuelto a caer de copa en copa, -los vinos de botella en botella, ejem...-

Bueno, pongamos que el Malaveïna que me zumbé en Pedro Roca fuese un '04 -¿o era un '06?...- y pongamos que siendo cada vez más acólito de los caldos producidos bajo la D.O. Empordá, ha tenido que ser muy sólido el menú -cosa que si ha sucedido- para que no apartase los platos y me diese únicamente al disfrute del vino.
El caso, es que no lo elegí yo del todo; mi elección, un LES TERRASSES de la bodega Álvaro Palacios, estaba agotado y fue el sumiller, quien me indicó similitudes con un Malaveïna, que me llenó el ojo de inmediato.  Creo que llevaba ya algún tiempo sin reivindicar la importancia de un buen servicio en los restaurantes. El momento de escoger un vino para un menú, puede mandar la experiencia al traste, o elevarla al infinito; siempre es bueno contar con ayuda, cuando uno la necesita. 

Todavía no he hablado del vino; ¿que puedo rescatar de su cata?. Pues que es un vino que no marca demasiado la madera, pese a su extensa crianza, y tiene una mezcla de uvas (MERLOT, CABERNET Y SYRAH) que suele funcionar de vicio en mi paladar. Tres uvas, para una finca de nombre Malaveïna (trad. mala vecina).
Me quedo con las notas especiadas en nariz y con su elegancia en boca. Sorprendentemente fresco y balsámico, mineral; que nadie se asuste por el Cabertnet Sauvignon y por los 14 meses que pasa en barrica.

Os dejo un interesante enlace con el que me he topado en Adictos a la Lujuria, sobre el Castillo de Perelada Finca Malaveïna 2006 .

En internet se puede encontrar a la venta, por menos de 20 € y teniendo en cuenta el vino del que os hablo; me parece una RCP fenomenal.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Será Maravilloso Viajar a Mallorca...

... y ahora, más que nunca.

Exclusivas DANINLAND les ofrece a continuación, la excusa para tan poco original título; en forma de noticia noticiosa:

A Coruña se verá despojada en los próximos días, de la mejor -según criterio de servidor- CasadeComestibles que ha tenido el placer de acoger en estos últimos años. Jordán & Cía se mudan a otro local; donde oficiarán en un nuevo modelo de negocio, orientado a la elaboración de panes de varios tipos, platos con un pronunciado toque mediterraneo y dulces para consumir a cualquier hora, en un ambiente de bistró. 
Poco en común, con lo que han estado ofreciendo durante su estancia en la "pequeña peninsula" coruñesa. Poco, excepto pequeños detalles como el número de mesas de un local que tendrá el sello estético característico de CDC y lo más importante, su filosofía; CALIDAD, EXPERIENCIA, PROFESIONALIDAD Y SABER HACER por los cuatro costados. Más de lo que parte del gran público ha sabido apreciar, pero ese es otro tema...

Los "maestros comestibles" han escogido entre los millones de posibilidades que este mundo ofrece; un destino fuera de los importantes circuitos gastronómicos, para llevar a cabo un proyecto sencillo, humilde y de verdadero amor por su oficio, por los alimentos -los productos- y por la clientela. Sin envoltorios innecesarios, sin trucos, ni espejismos... Ese destino no es otro, si no  Colonia de Sant Peré, en el municipio de Arta, como ya había desvelado el título de la entrada; Mallorca.

Dejo una foto a los lectores, para que os hagáis una idea de la belleza que rodeará a la nueva CasadeComestibles (viéndola, incluso me extraña menos que estén deseando hacer las maletas...).
Podréis disponer de más info sobre la noticia en este enlace y en su maravilloso blog.

Resulta difícil para servidor,  no caer en la magnificencia, al hablar de tan "comestible" pareja profesional. Es ciertamente complicado y lo es por lo que el maestro ha transmitido a los seguidores del citado blog, con una interminable lista de delicias con las que nutrir cuerpo y espíritu. En directo, la experiencia mejora, se multiplica  convirtiendo cada conversación, cada pequeño gesto, en felicidad, en conocimiento y finalmente en la posesión de pequeños tesoros inmateriales. Tesoros cada vez menos codiciados por una sociedad petulante, amante de lo material, de lo impersonal y de lo aséptico .
Mi última visita a CDC podría servir como muestra de la anterior sarta de palabras tan torpemente hiladas.

Como los grandes acontecimientos en la vida; mis experiencias en este restaurante, han ido desde la más absoluta espontaneidad, hasta la milimétrica planificación, guiado por ambos maestros; en sala y cocina.

Os dejaré muestras plagadas de platos inéditos, incluyendo los de mi "pase final" en este periplo coruñés; antes de que vuelvan a reinventarse de nuevo.
Hallareis un repertorio de inusitada amplitud; basto e inabarcable, que pone de manifiesto la suculenta  y camaleónica cocina del maestro Jordán; de su trabajo a partir del mejor producto, con la ejecución técnicas limpias, sanas, ancestrales o actuales; pero totalmente artesanas (algo que parece NO existir en este nivel) y sin ayuda de la tecnología que albergan los restaurantes de alta cocina. Las manos del chef, su buen hacer y punto. Podría haber cocinado todo esto en la mayoría de vuestras cocinas y no se me ocurre ningún otro de quien, dentro de este nivel, pueda decir lo mismo.

Dejaré platos fuera del tintero; os emplazo a mis antiguas entradas dedicadas a CDC y os advierto que estos platos están sacados, por orden cronológico, de un menú degustación muy especial, una improvisada comida entre semana y mi última cena, compuesta de platos escogidos por mi mismo.
  -Un Gran Menú Degustación-
Las mejores CROQUETAS DE MARISCO, desde un perfecto rebozado en el que, si no me equivoco, interviene en polvo de los cuerpos de gambas de Palamós, hasta su relleno; imagináoslo...


ENSALADA DE VIEIRAS CON TABOULE (CUS CUS) Ligereza, sabor,  proporción; finura.

BONITO CURADO GRAVALAX Y ANCHOA MARINADA CON TIRABEQUES CON CALDO DE CENTOLLA. Sin palabras.


GAMBAS DE PALAMOS A LA PLANCHA (con emulsión de sus cabezas y polvo de sus cuerpos) CON CALAMARES FRITOS. Alrrededor de una docena de gambas de Palamós; no me quiero ni imaginar lo que cobrarían en un estrellado por este plato; aunque seguramente pondrían tres gambas y un montón de gelatina de nosequé con esencia de nosecuanto. Es más barato.


TARTAR DE TERNERA , FOIE GRAS ESCABECHADO; un clásico de la casa que servidor solicitó repetir; pues ya lo había disfrutado en ocasiones anteriores. Si se percibe alguna discordancia, es por que había manipulado vuilmente la mostaza, antes de fotograiar el plato.



SOPA DE GUISANTES A LA MENTA , REMOLACHA Y TRUFA. Había solicitado un plato 100% vegetal; casi se me saltan las lágrimas -bueno, sin "casi"-


VENTRESCA DE BONITO DE BURELA, ARROZ NEGRO Y SOPA DE HINOJO. Siento deseos de morder la pantalla. ¿Acaso ustedes no???

CHOCOLATE NEGRO Y BLANCO MENTOLADO, HELADO DE HIERBABUENA Y CARAMELO DE PIPERMINT


-Una comida improvisada-

Tartar de Salmón Salvaje con lima, aceite de arbequina... Fresco como entrante; generoso como un principal.


Calamares de anzuelo rellenos de vainas de judías y calabacín, con patata pisada y ajada. Un 10; un plato tan sencillo, como sublime. Sólo por la patata merece la pena cruzar el charco.

Helado de coco, membrillo de fruta de la pasión; sopa de mango, granada y almendra picada. Un postre de CasadeComestibles.


 -Mi última cena (hasta el momento)-
Advierto que las fotos están tomadas con una cámara "de juguete"

Pan de borona con pasas remojadas en Moscatel. Esto es PAN.


Mantequilla de albahaca


 Pechuga -magret- de pato fría con foie, manzana y champiñón. Un aperitivo improvisado.



El siguiente plato merece un post por si sólo. Insuperable y difícilmente igualable.

ENSALADA DE BOGAVANTE HEMBRA GALLEGO (99% bicho y 1% tomate raf?, patata, aceite arbequina, patata y rábano). ¡Que poca justicia le hace la foto!, ya no al sabor; cada porción del cuerpo del bogavante era literalmente de cuchillo y tenedor.


VACA A LA MODA en DOS servicios. Este plato merece DOS post, por si sólo. Las patatas eran un auténtico alarde de punto y sabor, la carne de vaca y sus tendones, para llorar y el fondo para reventar de placer.


Habéis leído bien; "en DOS servicios". Quienes no estéis familiarizados con el plato, os recomiendo que indaguéis en su elaboración; prácticamente se cuenta por días. ¿Donde si no podría haber comido esto?. Creo que la cocina auténtica implica  tiempo y un esfuerzo que casi nadie está dispuesto a realizar; CDC, bendita excepción.
Tras haber pasado por las manos del maestro, además de rotundo, era fino; es un plato que todo aspirante a gourmet, debería probar al menos una vez en la vida.




Musse de chocolate, con merengue, sopa y helado de mango, frambuesas y una teja espectacular.
Ya sabéis; el merengue es una vieja perversión del menda.


Tras este primero, segundo y postre; podría viajar a Mallorca a nado y tendría que vigilar, para no pasarme...
 

domingo, 13 de noviembre de 2011

Pedro Roca RESTAURANTE, Santiago D. C.

El restaurante en el que oficia el maestro Pedro Roca; sea uno de esos pocos que me han llevado a las más altas cumbres del disfrute,ayudado de factores plenamente tangibles. Factores como el manejo PROFESIONAL del mejor PRODUCTO, y el saber de una carrera de basta EXPERIENCIA; resultando una conjunción de circunstancias, que conducen ni más ni menos que al placer verdadero. 
Por otra parte, y teniendo en  cuenta el escaso número de veces (tres, en concreto) que lo he visitado; también es el que proporcionalmente más he "desperdiciado", bien sea por los azarosos caprichos del destino, bien por mi falta de competencia al escoger un "donde"  más adecuado a mis pretensiones; o expectativas. Palabra, esta última, de tan reiterada utilización en el mundillo gastroblog, que francamente, comienzo a tener asqueada.

¿Puedo a estas alturas hablar de la dimensión del disfrute, en un restaurante que ya he posteado -afortunadamente, a mi juicio- hace aproximadamente un año?. Claro que puedo; lo estoy haciendo. Lo estoy haciendo por que lo creo necesario para transmitir algo que puede resultar interesante a cualquier aficionado indeciso, o para auto examinarme en mi capacidad de transmitir ese "algo" desde un prisma personal.
Me refiero con eso del "prisma", a mi visión de lo que me resulta deseable en un restaurante; lo que me parece interesante en su propuesta, su oferta.

Pues bien, ¿será que he sido yo el que ha cambiado?, ¿habré sufrido una evolución, o involución?. Puede que haya algo de eso, puede que lo accesorio no me atraiga tanto como en los inicios de esta afición por la gran cocina (a considerar...). Es cierto, en Pedro Roca, en su oferta, hay poco de accesorio. Poco o nada y lo que si me encuentro es un montón de sensaciones palpables; masticables o, cuando menos, paladeables.

No he tenido música durante este servicio; cosa que hubiese preferido. No sólo le van caer hostias al Celler de Can Roca (va de Rocas el asunto...); pero el caso es que aquí, poco menos, que no he tenido tiempo a echarla de menos. Gemí casi a cada bocado y a cada sorbo, cerré los ojos y disfruté más allá de lo disimulable... ¿Por que?. Por que los que yo llamo "MIS templos"; se acogen a la estricta norma de ofrecer calidad y sólo calidad. La entrada a este restaurante ofrece un espectáculo de espirituosos en los que en un rápido vistazo cualquier aficionado de tres al acuarto percibiría una búsqueda de la calidad, de la selección, de la excelencia, a fin de cuentas. Lo mismo sucede con una carta que ofrece una extensión fuera de lo común, teniendo en cuenta el nivelón del que allí se dispone. Se percibe en los platos, o en la selección de los vinos, un gesto por acercarse a la clientela más clásica, por  agradar,sencillamente; pero sin dejar de lado la calidad. Y algo que no debemos dejar de lado, es el trabajo que supone, disponer de lo anteriormente mencionado en condiciones óptimas para su provecho.

He tenido recientemente, un encuentro  con cierta amistad, en el cual comentamos nuestras  respectivas últimas visitas a restaurantes.
Al parecer nos habíamos estado pisado los talones, dentro del circuito de "grandes" gallegos y el que nos ocupa, aún con todo lo que había caído últimamente (mucho y muy bueno); había marcado la diferencia y nos había hecho reconsiderar al resto de baluartes; entre los cuales tenemos muchos en común.
Señalo este hecho casual, para que se aprecie que mis palabras son del todo objetivas y sinceras. No estoy recomendando nada, que no recomendaría a mi mejor confidente...

El Menú Plaza de Abastos que Pedro Roca ofrece por 50 €, no tiene NADA que envidiar a muchos de 75 €. Lo se, lo se; está feo hablar de pasta. Pero yo me refiero al RENDIMIENTO de la misma y a la hora de planear un homenaje, considero a Pedro Roca como una de las principales opciones.

Por cierto, también en esta ocasión el día después me habló y muy bien, de la visita a esta casa. Mis sistemas estaban bien a punto; tras ingerir no sólo calidad, sino cantidad superior a lo que ofrecen  casi todos sus competidores. 
Me dejo de paparruchas; todas las cocinas tienen su aquel y no se trata de desmerecer a ninguna, pero este menú,encierra placeres inalcanzables para algunos que lucen un especie de sello alta cocina low cost (por cuatro pleuros menos, como mucho...), o de falsa cocina de mercado, o de platos nitrogenados...

Os presento a uno de los menús que más feliz han hecho a mi estómago y a lo demás. Se me antoja apropiado describirlo como sencillo en su grandeza. Disfrutadlo:

 Ensalada de Nécora:

En mi vida he disfrutado tanto de una nécora . En realidad me cuesta creer que no hiciesen falta, al menos tres, para conseguir esta espléndida ensalada. La tersura de la carne, el sabor, la proporción de vegetal y la sutileza de la vinagreta; definen lo sublime.

Chipirones de anzuelo con níscalos y cebolla caramelizada:
¡Que bién casaba la seta, con el cefalopodo!, ¡que frescura, de porductos!, ¡que rico!!!


Huevo de quica (a baja temperatura) con setas y jamón ibérico. 

Con la suma de un fondo pleno de sabor; no hay nada más que añadir.

Lenguado con navajas y remolacha:

Enormes la navajas. Generoso en su cantidad, pero desacorde con mi gusto. Reconozco que es un platazo, de nuevo elaborado con gran producto. 
Encontré poco (ningún de hecho), Maillard en este plato. Aún gustándome, hecho de menos esos pescados a la plancha, aunque rosados en su interior, con ese caramelizado en su exterior y una salsa a base de un majado de azafrán, migas...Sencillamente disfrutaría más de las navajas a la plancha, cuestión de gustos.

Rollo de bonito con habas:


Todo lo que me faltó en el plato anterior y un poco más -infinitamente más- lo encontré en este. Para mi, que continuo sumido en la ignorancia; esta preparación es del todo inédita. Suave y ligero, casi como una musse y sabroso  hasta la extenuación. Un plato de reconforto para cualquier paladar.

Mollejas con foie y setas:

¿Que decir? del pato que más me alucinó de todo el menú??? Mirad el punto de caramelo del fondo y si no babeáis, es por que la foto no le hace justicia... Está de moda "texturizar" los fondos; aquí COCINAN y se dejan de hostias.

Gazpacho de fresas con nata:

Fresco y ligero; lo cual a esas alturas era simplemente necesario.

Tarta caramelizada de filloas y souflé de castañas (o algo así):

Sin un postre que me haga cerrar los ojos; no hay menú perfecto y cada vez hay menos sitios donde esto sucede. Este no es el caso. Por fin una gran postre; algo diferente al sorbete de nosequé con sopa de nosecuanto.

No han faltado snacks y pettit fours de CALIDAD. Así que, en plan espléndido,  hasta voy añadir la ubicación de este majestuoso restaurante, para que nadie se pierda por el camino.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Jurmet Confesion's y IV; la defitiva ¡¿¡Tengo un Blog!?!!!



·COMIENZO A ENSUCIAR LA HOJA EN BLANCO; AMBIENTANDO LA ÉPOCA EN LA QUE SUCEDIÓ LO A CONTINUACIÓN NARRADO.-

Estáis comenzando a leer e principio del fin de esta saga bizarra, con la que espero, hayáis disfrutado; o por lo menos os hayáis regocijado con las miserias ajenas, como los cabronaz@s que sois. No se me tome a mal, yo disfrutaría de igual modo.
En el "capítulo" anterior, lo habíamos dejado, hablando sobre la primera entrada publicada en este foro; así que voy a echar un vistazo, a ver en que he mentido, o si he disfrazado los acontecimientos...
...uff, pues no, todo correcto; hasta me alegro de haber dado alguna nota negativa, eso continua formando parte de mi "estilo".
En fin ¿por que le otorgo tanta importancia a esa primera entrada?. Os pondré en antecedentes de la época que vivía servidor:

Recién entrado en una empresa que pagaba a fin de mes, lo cual para mi, era novedad (cuanto empresario-delicuente suelto) y comenzando a hallarme aburrido de la "profesionalización" hacia la que mis amigos estaban evolucionando en una actividad, tan de moda actualmente, como es el Poker; me enfrentaba a un viernes noche lleno de posibilidades.
Recuerdo que tendría lugar un concierto interesante por los Ferroles, algunos de mis colegas se disponían a ingerir litros de ron/cola, etc y yo; decidí acometer, sólo, una cena tranquila, sin tener que trajinar durante horas y dejar la cocina hecha un cristo. El resto es ya historia; pero ¿cuales habrían sido mis sensaciones durante esa cena solitaria?.
Está claro que el buen hacer de Casa Pendás, había ayudado a que la velada fuese cómoda y placentera; pero jamás me hubiera imaginado la liberación que ello supuso. Un aliciente para disfrutar mientras continuaba aprendiendo, afianzando mi gusto por el vino, por esa cocina con un algo más y por poder desconectar del resto de mi vida, con una actividad opuesta a lo que por aquel entonces tenía como costumbre.

Continué compartiendo mesa con mis amistades, sobre todo con quienes también eran, al igual que yo, unos lambones; pero con el paso del tiempo algo iba creciendo, una bestia interior reclamaba mayor atención y Hyde, fue poco a poco, suplantando a al buen doctor Jekyll. Ambos tenían algo en común; eran seres mucho más extraños incluso de lo que su aspecto exterior anticipaba; divertidos, melancólicos, abiertos a la par que inaccesibles... lo extraño es que ambas personalidades se gustaban y se respetaban cada vez más.
A día de hoy se han estrechado la mano bajo un lema de dulce y necesario egoísmo:
"Soy yo; es mi tiempo, es mi pasta."

Por aquel entonces, los únicos blogs que consultaba eran los dedicados a temáticas como el cine o la música y para publicar un comentario en los mismos, utilizaba un nick que unificaba mi nombre de pila, con el de un filme que prácticamente, aún no había visto la luz; INLAND EMPIRE. Tres horas de divagaciones enmarcadas en el ensoñador, extraño y oscuro universo de David Lynch; que me habían atrapado con su ritmo opresivo, similar al de esas pesadillas de las que uno no logra despertar.
Siempre he dado mucha importancia al mundo de los sueños; a la tierra interior que todos encerramos y a lo que hay bajo la superficie... ...no os lío más con mis "atrapadas"; el caso es que, como ya habréis supuesto; el resultante no era otro, si no DANINLAND.

·LAS HERRAMIENTAS DEL CONOCIMIENTO.-

Sin la ayuda de los blogs, pasando de las frías y aburridas guías gastronómicas a mi alcance y sin conocer grandes aficionados gastronómicos; la cosa no rodaba todo lo bien que debiera. Pero esto de la red es la leche y no tardé en encontrarme con la web de una conocida asociación de chefs gallegos. NO VEáis que alegría; cuando vi por allí a mi querida A Estación y a muchos otros que poco a poco -sin proponérmelo en un principio-, iría visistando.
¿Impedimentos económicos? No, ¿por que?; siendo fin de semana, caso de haberme dedicado a otros menesteres, la noche me salía igual de cara, o más y la resaca se multiplicaba. Era cuestión de dar prioridades y yo las tenía bien claras; por lo que una pequeña  LAROUSSE  de vivencias gastronómicas, comenzó a escribirse.

·AHORA SI, PADRE IO CONFESSO.-

Yo y mis amigos nos partíamos la caja viendo facturas de menús degustación, como el de Casa Solla, sabiendo que esa noche de "autos", había dormido en  un hotel alumbrado por muchas estrellas, en el que destacaba un estupendo hilo musical; mi Opel Corsa.
Lo que para muchos será triste y patético, para servidor ha sido una variedad de fiesta y jolgorio un tanto fuera de lo común.
 Este fin de fiesta, repetido en un buen número de ocasiones, ha logrado entre otras cosas; que ha día de hoy; todavía no sepa lo que es dar un positivo en un control de alcoholemia... 

·HACÍA YA TIEMPO QUE NO NOS VEÍAMOS, ¿DONDE HAS ESTADO EL FIN DE SEMANA PASADO?.-

-Pues si te digo la verdad... 

Dependiendo de la persona, del tipo de amistad que nos uniese, o de las ganas que tuviera de expilcar una aburrida y extraña historia sobre en que se había convertido mi vida durante los períodos de ocio; pues la verdad más o menos resumida, o sencillamente:

...¡Uy!, me está vibrando el móvil. Dime mamá; ¿si?, ¡no me digas!, ya ni me acordaba. Tengo que irme. Abur.

·MI PRIMERA CENA EN CASA MARCELO...-

También es cierto que hay noches y hay noches...:

(Me va a dar una bofetada, por que pensará que le estoy diciendo que parece un tío...)
-Oye, ¿sabes que tienes un aire con David Bowie?
-¡Me encanta Bowie!
(...pues no)

Diez Gintonics atrás de tan etílica conversación, disfrutaba de mi, ya de por si, inolvidable primera velada, en Casa Marcelo. Sentí al finalizar esa cena un halo melancólico.
Si, en efecto; tras tan eyaculadora experiencia -y continuo hablando de la cena-; sentí cierta tristeza, pues mi intuición me advirtió de que no encontraría nada de tamaña intensidad dentro de mis gastroexperiencias. Lo cierto, es que pasaron meses hasta que di con algo que, en el mejor de los sentidos, le hiciese frente.
Por cierto, que durante todo esos meses el Nove había pasado por la piedra.
Sólo queda reflexionar como un restaurante que, en algún punto diverge tanto de mis ideales; continúa seduciéndome de tal manera.
Creo que se debe a que el maestro, sabe como pocos, unir lo mejor -casi siempre- de la "vanguardia"; con la verdadera alta cocina de sus maestros -gabachos, o no- y ha sabido extrapolar eso a los demás elementos de su negocio; con una oferta única. No entro en si es mejor, o peor; pero ha dejado huella y como sucede en estos casos; ha sido y es, imitado hasta la extenuación.
O a mi me lo parece, aunque prefiero dejar dicha reflexión para otra ocasión.


·UN MANIACO OBSESIVO CON UN CLARO TRASTORNO BIPOLAR.-

Me recuerdo a mi mismo, entrando en algún restaurante con una melena a la altura del ombligo y una barba de lo más estrambótica. Sólo tras oír algo del estilo "Perfecto sr., le acompaño a su mesa" y haber visto el rictus de quien me había recibido; tenía bastantes pistas, para saber con que tipo de profesional me "enfrentaba".

Siempre he procurado que mi presencia fuese tranquilizadora; lo cual normalmente servía para que todo transcurriese de igual manera. Pero ya que hablo de profesionales; se me viene a la cabeza uno muy bueno; que trabaja en un restaurante de Santiago D. C.
Ese restaurante había sido escogido por mi; para ser "victima" experimental de mi particular búsqueda del placer.  Utilicé para ello una herramienta de la que me solía valer habitualmente en el ámbito doméstico; el cannabis. Recordad, queridos lectores, que por aquel entonces, alegraba mis sesiones de cine en casa, con Marron Glacé y brandy; en vez de palomitas y Coca cola.
Era, por tanto, una curiosidad de lo más natural el querer averiguar que sucedería, si cambiaba el bar de un colega, con su bollería industrial, la interminable gama de snacks de bolsa y los restos de la olla de los callos, que habían servido a modo de pincho gratuito; por un escenario más elegante y unos comestibles más nobles.
Pues lo averigüé una fresca y amable noche de jueves en verano. Así que allí estaba yo por primera vez; caminando sin tocar el suelo, flipando con la música más de lo normal y ¡sorpresa!; siendo el único cliente en tooooodo el establecimiento. A día de hoy, no se como pude controlar los brotes de ansiedad que tal hecho me producía y aún así, disfrutar.
Durante esa cena, el vino descansaba demasido lejos de mi alcance y no estaba el horno para bollos... y tras finalizar la misma; mantuve una interesante conversación con el chef. Fue durante dicha conversación cuando de verdad y en secreto, surgió la idea de patearme los muchos restaurantes del Grupo Nove; que por aquel entonces, me restaban por conocer. Siempre le estaré agradecido por ello.


Alguno se preguntará que tal me había ido con el menú durante esa cena plagada de exquisiteces. Pues muy bién, de no ser por que, por primera y última vez, ¡me pareció poca cantidad!!!. Eso es lo cierto, los restaurantes de alta cocina lograban apaciguar a la bestia; pero no si estaba dopada. -Podéis reír en paz-
Afortunadamente; un día sentí un irrefrenable deseo de consumir una carne excepcional y me trasladé a Santiago, para comer la ternera estofada en Monterrey de El Mercadito y a día de hoy, no se si me alcanzarían los dedos de las manos, para contar las veces que repetí en esta casa.

·MI AMIGO INVISIBLE.-

Tras la anterior experiencia, surgieron muchas nuevas y en su mayor parte; las podréis ver relatadas en este foro. De entre las que no he dado testimonio, se pueden encontrar algunas de las mejores y también de las peores*.
He pasado tardes estivales entretenido con la económica afición de la lectura, la playa y la música de mi reproductor mp3 y noches del más glamuroso disfrute gastronómico. Recuerdo la primera ocasión en la que probé el suave tartar de ternera que prepara Rafa Centeno en su Maruja limón y esa vieira con tocino y pil pil de naranja; casi lloro... También he tenido placenteras, casi idílicas, sobremesas con brandys, ginebras, armanags y cafés excepcionales, exquisitas escapadas entre semana, hallazgos restaurantiles de lo más inauditos, algún batacazo y o, estacazo, en el mismo campo.

Creo, no obstante; que para recolectar buenas experiencias se ha de estar abierto a seguir el instinto y a disfrutar de la mismas. El buen rollo es un buen comienzo y el saber cortar por lo sano, también es a veces necesario:


-Como veo a su acompañante con desgana, ¿quiere que le traiga a usted algo de aperitivo?, ¿un albariño?, ¿un cava?...
-Para mi nada, gracias; pero a mi amigo invisible le va a traer usted una copita de espumoso. Ya se la pagará él aparte. 

Abierta la botella y bebida la copa por mi; no se si mi amigo invisible se habrá pasado a abonarla. En fin, tendrá mala memoria...
 
·MENÚS DEGUSTACIÓN CASEROS.-

Cualquier aspirante a cocinillas, necesita incentivar sus ansias cocineriles mediante elogios externos. Comienza así una incesante búsqueda de víctimas, dispuestas a comerse la chorrada que había imaginado mientras aguardaba mi turno en la consulta del médico, o en un largo viaje de regreso, tras un largo día de trabajo, o mientras eludía la conversación de mis acompañantes, y espiaba lo que sucedía el canal del huevo, mientras tomábamos unas cañas en el bar del final de la avenida...
Está claro que si eres poseedor de un importante recorrido en los restaurantes más molones de la vuelta; la inspiración puede llegar a cegarte. Literalmente.

Así que cuando me di cuenta; estaba en la cocina rodeado de miles de bolsas de la compra a medio abrir, intentando llevar a buen puerto ingredientes que jamás habían pasado por mis manos; en medio de un cristo, que por momentos se me antojaba el Vietnam de las cocinas. 
"¡Creía que tenía alguna receta para eso!" que pretendía cocinar; trataba de avanzarlo, pero el postre está cocinándose en un horno sin rueda de temperatura, los hornillos estaban ¡todos ocupados!!! No estaba seguro de si el vino llegaría a enfriarse, o ya estaría congelado, cual sería el orden de los platos y ese invitado incrédulo, novato en el tipo de reunión que trataba de llevar a cabo, no paraba de inmiscuirse en la cocina, adornando cada enterada con frases del tipo: ¿pero de verdad eres tu el que cocina?, ¿habrá que ir avisando ya a la ambulancia?, ¿llegas para la cena, o tendremos que esperar al bajón de media noche?
Y tu sólo deseas que se aparte de tu vista y recordar para que has pelado y lavado tantas patatas, o para que has puesto esa sartén con aceite al fuego, o sencillamente, recordar el final que habías planeado para las grosellas que descansan al borde de la mesa, amenazando con caerse de un momento a otro.
No logras asimilar ni de lejos, como un par de platos se han convertido en un menú degustación de unos 7; para unas ocho personas, ¿o éran 11?, ¿me he contado a mi mismo?. 
Por que en mi pertinaz agrado por los allí congregados, me sentaba a comer con todos mientras mi espalda chorreaba, el corazón latía a mil por hora y no podía apartar mi mente de lo que me restaba por hacer, para marchar el siguiente plato.
Pasé muchas de esas pruebas; a veces incluso inducido por los ávidos devoradores de mis gastroparidas y acabé por caer en la cuenta de que realmente lo pasaría mejor, si me pudiese dedicar SÓLO a cocinar. Si, sin interrumpir tan ¿dichosos? instantes con el royito social de compartir mesa. ¡Para eso están los restaurantes!!! Ejem...



Por que ese primer mandamiento del buen anfitrión; "No cocines recetas que no conozcas a la perfección y hayas practicado con anterioridad", ese mandamiento, lo siento, pero no va contigo.
Así que, desconfía; querid@ comensal si vienes a mi casa y te preparo un arroz meloso; te invito a una tabla de quesos con confituras caseras, o te deslizo un plato con unos buenos lonchones de un foie mi cuit casero, acompañado de un buen vino. Desconfía; por que puede que te respete más que a mi vida, o puede que te pida algo a cambio del placer que sin duda recibirás.

·UN CASO CURIOSO (ATÍPICO, ÚNICO POR DESGRACIA), SURGIDO DE LA LECTURA DE LAS PÁGINAS DE OCIO.-


Y de un titular que rezaba:
"Vuelve Jordán con su cocina moderna y sugerente"



Te crees que has visto de todo; que ya nada puede sorprenderte realmente y te topas con una reseña que habla de un restaurante llamado CasaDeComestibles. "Vaya nombrecito", piensas y continuas leyendo; "Un acólito de Santamaría, no se yo, no se yo..."



No tardé en decidirme; llamé para encargar un menú degustación, me di un baño caliente alumbrado únicamente por dos velas, animado con un par de copas de absenta -ritual incluido, tengo los accesorios-, escoltado por el Vena Cava de Diamanda Galás y me marché para A Coruña, a ver que me habían preparado.

Recuerdo que llegué, me senté a disfrutar, VI LA LUZ, pagué mi cuenta y me fui.
¿Me fui para casa???, pues no. Me adentré en un garito a tomar más gintonics de los que pueda recordar -cenando había caído una botella de tinto R.D.R. '06-. Al día siguiente amanecí en el interior de mi auto, en plena calle. Me fui para casa, me duché y me fui a preparar un par de  paellas para unas 60 personas. Lo más increíble es que NO sabía del todo, como preparar una paella...


Al cabo de unos meses, dejé testimonio de la visita al restaurante, en forma de post injusto y transcurridos unos días, recibí las amables correcciones que al mismo, había practicado el autor de tan impecable menú. Podéis verlas allí publicadas
Tardé en volver a pisar el cielo -pues algo de vergüenza también tengo- y ,en efecto, pude constatar que vivo poco más de media hora, del paraiso de los gourmets. Una microgalaxia que no opta a ser descubierta por las masas, si no por los verdaderos amantes del buen comer.
Lo mejor de todo, es que incluso yo, ¡si yo!!!, tengo permitida la entrada.



·EL FIN DEL PRINCIPIO (O AL REVÉS).-


Pasado el tiempo; ya había caído en el vicio de conocer más y más restaurantes, criticados en la red con mayor o menor fortuna. El hecho de ir por mi segundo diario de visitas a restaurantes, arañaba tanto mi vergüenza que en mi cabeza no cesaba de repetirse una frase; "eres todavía más friky que esos que se dedican a largar por Internet". Entonces, ¿por que no?, pasada la etapa de dar a luz relatos fantásticos; no podía ser difícil contar lo que había comido en tal o cual sitio...
Una tarde de aburrimiento sobró para que me viese inmerso en un carril de aceleración, dispuesto a adentrarse en la autopista bloguera sin pisar freno, sin importarme llegar el último y sí el disfrutar del trayecto y que alguien más disfrute de como se lo haya contado.


¡DANINLAND ha llegado a la red! Tiene hambre, tiene sed y su único objetivo es saciar vuestros sentidos.
¡Música, MAESTRO! 


*Nito; cuenta de estrella Michelín y menú, de batalla.