PRECAUCIÓN: Post kilométrico, alto contenido en reflexiones del tipo "paja mental", mejor comenzar a leerlo ahora para rematar antes de que le concedan la segunda estrella, venga; a echarle... ganas!!!
Leyendo el titular se deduce cual ha sido el último restaurante que he pisado (en números rojos, no tengo remedio), pero sé que hay algo que desconcierta; así que, al estilo de algumos de mis filmes favoritos, empezaré por el final.
Leyendo el titular se deduce cual ha sido el último restaurante que he pisado (en números rojos, no tengo remedio), pero sé que hay algo que desconcierta; así que, al estilo de algumos de mis filmes favoritos, empezaré por el final.
Saliendo de mi segunda cena en este gastrotemplo pontevedrés; José González Solla, me despidió amablemente; haciendose eco del cambio de look de servidor. Supongo que la poca dificultad en reconocerme tras más de un año desde mi anterior visita, estriba en el hecho de que por segunda vez acudí sin compañía.
El caso es que en la anterior ocasión mantuvimos una pequeña charla tras finalizar la cena y por lo visto, al maestro le quedó claro que a ambos nos gusta el rock&roll.
Así fue como tras haberme tomado la comanda con las balsámicas palabras de "non teñas preocupación pola hora" y haberme decantado por el menú largo, en mi mesa tuvo lugar un concierto; aconteciendo este, con ritmo perfecto y algún que otro tema inesperado, cosa que celebro.
Convertiré la abstracción del párrafo anterior en algo más tangible:
Como no quería plimplarme mi habitual botella entera, con copa de vino dulce al final y ya estaba disfrutando un amontillado de La Bota; me decanté por en maridaje más completo (el de mayor nº de referencias) de los tres disponibles, actualmente, en Casa Solla -SITUACIÓN-.
Como algunos de los vinos que formaban la plantilla, ya los había probado (Caso del Gorvia y algún Alvariño); el propio Solla se ofreció a efectuar algúnos cambios. Yo me dejé en sus manos y es verdad que estoy de todo, menos arrepentido.
Llegado este punto es hora de reconocer alegre, que he gozado de uno de los mejores servicios del vino de los que hasta la fecha he tenido el placer de disfrutar. Digo lo de "reconocer" por que ese era el punto que peor considerado tenía de este restaurante y ahora me parece uno de sus puntos fuertes.
Aclaremos esto; uno le da tanta importancia (o casi) a lo que bebe, como a lo que come y a veces, más.
En mi anterior visita había salido un pelín defraudado por esto y por lo que me pareció una falta de detallismo.
No me gustaría que se comtemplase esto como una queja, si no como el hecho de que el haber ampliado mi experiencia en un restaurante puede variar el concepto que de él se tenga (para mejor o para peor, claro está).
Esto es lógico y hay que aceptarlo; normalmente trato de reflejar el hecho de que las opiniones de un servidor puedan ser arbitrarias; por lo que, cuando no lo hago, procuro estar juzgando con la mayor objetividad posible y lo único a que aspiro, es a DISFRUTAR y luego , caso de que me apetezca, contarlo con mayor o menor gracia.
Daré por tanto, al final del post, algunas conclusiones que me parece importante señalar.
Por si alguien lo duda, de lo vivido en Solla no me queda más remedio que el Chapeau al personal del restaurante, por que durante las tres horas largas en las que sucedió esta experiencia; DANINLAND levitó casi constantemente. Esto lo digo yo antes de que alguien más lo comente...
85 euros, son muchos euros por un menú; pero no son demasiados cuando el menú posee la calidad de este y se escolta de tremenda cantidad de snacks y aperitivos.
He ahí el pan con aceite de arbequina en forma tubular que se acompaña de un sabroso polvo que me recordó al pimentón. Me da mucho miedo este tipo de presentaciones (la del aceite) por que desconfío enormente de los productos que puedan intervenir en que un aceite de se muestre sólido y totalmente estable durante un buen rato; pero resutó sabroso y divertido.
El Bloody Mary (el retángulo rojo de la pizarra de la izda.), impresionante en textura e intenso en sabor y el paté de anchoas con pan de aceitunas de nuevo sabroso y divertido.
Finura y sabor en este vasito con capuccino de repollo y ras al hanout...
o lo que es lo mismo; una ligera y espumosa crema de repollo blanco con una mezcla de especias.
o lo que es lo mismo; una ligera y espumosa crema de repollo blanco con una mezcla de especias.
Con la croqueta cremosa de mejillón continua el ascenso térmico de mano de una suave bechamel, en una preparación al estilo del chef, con un crujiente de cebolla (juraría) a modo de rebozado.
La vieira marinada con cítricos en jugo de lechugas, me gustó lo justo; me pareció carente de la profundidad de la que nunca carecen los platos de mi podio de chefs e incluso un pelín difícil de comer. Como sabreis soy tan anormal que valoro la comodidad a la hora de disfrutar las viandas; por lo que la utilización de ciertas vajillas potencia o empeora el plato, casi tanto como el corte del producto.
Prometo dar mi baremo para medir los aspectos a valorar en un restaurante, si alguien lo requiere.
Llegó a continuación un plato cuyo nombre se encarga de autocomentar; el tartar de bogavante bien aderezado, con sopa de pescado infusionada en citronela y cítricos. Frente al comensal; el chef incorporó de una tetera, la mencionada sopa y el comensal pensó "alá vai o bogavante a tomar por...". Pues nada más lejos; el plato, perfectamente condimentado no vió su sabor evaporado en un caldo insulso; si no que se vió ayudado de una sabrosa sopa, dando al plato una enorme suculencia, que ayudada por el vino suscitó el multiorgásmico levitar que sucede en estas enrriquecedoras experiencias.
Este es un plato fuera de menú, y una de las cumbres del mismo; un lomo de jurel sobre ensalada cocinada.
Plato que se me antoja de complicada ejecución; rico, sucuelento y fino como el sólo. El atentísimo servivio de los vinos, solapando los mismos y rellenado copas en casi todos los casos, logró que durante la degustación de este plato, Casa Solla apareciese ante mi a vista de águila...
Llegó después este plato llamado "la cebolla"; que no es otra cosa que cebolla en tres texturas. Divertido acompañado de un Valdeorras de Godello -el Val de Sil '08-; mejor como guarnición de una buena carne, o unas vieiras.
¿Alguien aparte de este mendrugo uniría esto a la vieira del principio para lograr el top de la suculencia?
Me gustó aunque no lo parezca; es por dar varios puntos de vista.
Huevo y setas, un revuelto sin dar vueltas; repleto de sabor sobre todo a trompetas de los muertos (seta), que potencia la preparación, de lo lindo.
La merluza en un fondo marino, escondía tras una apariencia insipida, una preparación de lo más sápida; el mar en la boca, que dirían otros. Un leve exceso en el punto de sal, pero si es un fondo marino, es un fondo marino.
En todo caso es un género de primera, cocinado con un punto perfecto que logró el amplio disfrute de un merluzo, declarado contrario a la invasión de la merluza en los menús degustación, que soy yo.
Un capuccino de lamprea, mostro una concentración de sabor de lo más reconfortante.
Esta es la cacheira con espinacas garbanzos y su caldo. La cacheira dejó a la sutil guarnición donde se merecía; a la altura del betún. Espectáculo cárnico de lo más recomendable con esa grasa gelatinosa que se pega a todo (mis arterias se incluyen en ese "todo") y que hace las delicias de cualquiera cuando se cocina de una manera tan sublime.
Me fastidia quedar de rebuscadillo; pero tengo que declarar que esta minitosta con paté del bicho, fue uno de los mejores bocados de todo el menú.
El queso del pais con membrillo y dulce de kiwi es algo que estaba deseando degustar antwes de entrar en el restaurante. -SIN FOTO-
La piña colada estaba rica y fue efectiva en su labor de limpieza.
El Afther Eight en blanco, muestra en toda su ligereza y aerea textura, la versión que el cocinero practica de la mítica chocolatina o bombón...
Chocolate, plátano estofado y aceite de mandarina. El mejor, perdón; el postre con chocolate que más me ha gustado, de los que pruebo en tiempo; rivalizando con el chocolate apasionado de Azurmendi y alguno más.
La combinación de sabores no es nueva; es buena, genial.
Aún quedarían "Los chocolates" que se sirven en el también completo apartado de pettit fours y en el que hallé auténticas delicias. Soy más chocolatero que el tal Paquito, lo reconozco.
Ya he comentado que en gran parte el levitar de los sentidos durante este menú, ha sucedido gracias al fantástico maridaje que lo completó. Este menú de vinos europeos se vendió a 45 €; un precio más que justo si tenemos en cuenta que 5 de las 8 copas fueron rellenadas (el primer riesling, dos veces).
No me he fijado como se refleja el tema del IVA en la carta de vinos, lo cual prometo indicar a partir de este post -sin excepción-; pero anticipo que hay algo que estoy viendo en la mayoría de las cartas de restaurantes de supuesto nivel, que me parece sangrante y es que cada vez menos se preocupan de indicar las añadas y el nivel en una carta de vinos, no asciende a nivelón, hasta que permite alguna que otra cata vertical.
Los vinos:
Amontillado, LA BOTA Nº 9; estupendo amontillado, más redondo y goloso que los de costumbre. Soy un fanático de la gama de LA BOTA, sobre todo del Palo Cortado del que ese día no disponían; pero he llegado a probar vinos de esta casa (algunos prohibitivos, la verdad) que son la quintaesencia de las delicias.
Riesling, Dr. Bürklin Wolf, Trocken '06???. El más divertido de los blancos y el que más repetí; me declaro riesling maníaco.
Bourgogne, A. Et P. de Villaine, Bouzeron 07. Divertido el Riesling, pero este ha sido mi blanco favorito de la noche. Es ligero, goloso; el primer blanco de la zona que conozco y me agrada tanto como los tintos. ¿Son todos igual de golosos?. Disculpad mi ignorancia, pero he dado pocos pasos hacia los vinos del país galo.
Valdeorras Godello, Val de Sil 08. Este ya era uno de mis blancos gallegos favoritos y sirve perfectamente para, como dice J. G. Solla, posicionarnos y ver que nivel ocupamos con respecto al resto del mundo" o "ver que en Galicia estamos haciendo algunas cosas bien"
Ribeira Sacra, Algueira Merenzao, 08. Otra añada reciente de un vino que estaba deseando probar desde hace tiempo. Es diferente a casi todo; según el chef; un "hermano menor" del que vendría después. En cuanto a este, de nuevo lo describiría como goloso y con una agradecida acidez.
Côtes du Rrône, La Saumande, Rasteau, 07. Los vinos franceses están visitando mi paladar cada vez con más frecuencia y con cierto éxito. Diría que este fue el vino que más me gustó de la nui, el más completo y complejo de los tintos, sin duda.
Riesling, Georg Breuer, Auslesse 07. Ligero, con punzada, ligero también en alcohol y de recatado dulzor.
P.X. La Bota nº 12. Bueno, de increible densidad, pero de excesivo dulzor; casi una reducción.
No he hablado del pan; que es un apartado completo con pan clásico, de centeno, o de aceite; que no se si elaboran en la propia casa, pero que tampoco me pareció nada del otro mundo.
Permitidme además una última pincelada sobre la carta de vinos, la cual, sólo dispone de blancos gallegos y extranjeros (no nacionales). Para el chef, Galicia es una tierra de muchos y grandes blancos y prefiere explotarla y posicionarla con respecto a lo que él considera como los mejores blancos del mundo.
Esto aparta al comensal de poder disfrutar grandes blancos nacionales, pero enfatiza lo que se produce en esta tierra, lo cual me parece espléndido; sobre todo teniendo en cuenta que en este restaurante cae una importante cantidad de turistas.
Conclusión:
Solla es rock&roll y posee uno de los más bellos y conseguidos escenarios gastronómicos que he pisado. Más que recomendable, peeero observo un handicap; ¿que sucedería si el maestro esa noche, no pisase la sala (por falta de tiempo, una baja en cocina...)?.
Pues me da la sensación que la experiencia puede ser la crema, o no...
Mayor solidez encontraremos al respecto en Pepe Vieira, donde el personal de sala siempre acompaña. No está en mi ánimo comparar; no sabría decir cual de los dos prefiero; pero está claro que en el panorama gallego comparten un estatus a tener en cuenta, amén de disponer menús de similar rango de precios.
En cuanto a los precios, en el caso de Solla; los menús se han incrementado alrrededor de 10 €. ¿Donde lo coloca esto frente al resto de foráneos que he pisado?, pues como siempre, va mucho en gustos, pero ahí anda con el Dos Cielos o el Azurmendi que dispone de un menú degustación por 75 €, por no hablar del Corral del Indianu, que parece jugar en otra división, y me han gustado (los dos últimos) más que el aquí relatado. Tampoco disponen estos últimos de la portentosa bodega de Casa Solla, pero se suele decir que en el resto de la peninsula los precios son más elevados (¿lo son?).
Ya se que de nuevo parece que disfruto poniendo en duda el nivel de la hostelería gallega; pero lo que intento es situarnos dentro de un complejo panorama, en el que estamaos arriba, pero no en la cumbre y en ocasiones tampoco en la RCP.
Y digo en ocasiones por que, ¿donde quedan los grandes gallegos (y contemplo a Casa Marcelo como irreprochable excepción, pues ofrece algo único y diferente a todos) al lado de otros grandes con rangos de precio que pagan la gasolina desde León -p. ej.-, como el Culler de Pau, o A Estación (con precios inamovibles hasta mi última visita), o Maruja Limón o el por algunos incomprendido, Casa de Comestibles?, por citar algunos conocidos.
En fin, que me pongo a largar y no paro; pero id a Casa Solla; que no os arrepetiréis de probar un menú que ,como pocos, por largo no está desestructurado y es capaz de ofrecer un ritmo ascendente también en cantidad. Quiero decir con esto que los platos principales, son los más grandes, lo cual se me antoja preferible a rematar con un minibocado de pescado o carne. ¡Lo mejor para el finaaal!!!
Esto aparta al comensal de poder disfrutar grandes blancos nacionales, pero enfatiza lo que se produce en esta tierra, lo cual me parece espléndido; sobre todo teniendo en cuenta que en este restaurante cae una importante cantidad de turistas.
Conclusión:
Solla es rock&roll y posee uno de los más bellos y conseguidos escenarios gastronómicos que he pisado. Más que recomendable, peeero observo un handicap; ¿que sucedería si el maestro esa noche, no pisase la sala (por falta de tiempo, una baja en cocina...)?.
Pues me da la sensación que la experiencia puede ser la crema, o no...
Mayor solidez encontraremos al respecto en Pepe Vieira, donde el personal de sala siempre acompaña. No está en mi ánimo comparar; no sabría decir cual de los dos prefiero; pero está claro que en el panorama gallego comparten un estatus a tener en cuenta, amén de disponer menús de similar rango de precios.
En cuanto a los precios, en el caso de Solla; los menús se han incrementado alrrededor de 10 €. ¿Donde lo coloca esto frente al resto de foráneos que he pisado?, pues como siempre, va mucho en gustos, pero ahí anda con el Dos Cielos o el Azurmendi que dispone de un menú degustación por 75 €, por no hablar del Corral del Indianu, que parece jugar en otra división, y me han gustado (los dos últimos) más que el aquí relatado. Tampoco disponen estos últimos de la portentosa bodega de Casa Solla, pero se suele decir que en el resto de la peninsula los precios son más elevados (¿lo son?).
Ya se que de nuevo parece que disfruto poniendo en duda el nivel de la hostelería gallega; pero lo que intento es situarnos dentro de un complejo panorama, en el que estamaos arriba, pero no en la cumbre y en ocasiones tampoco en la RCP.
Y digo en ocasiones por que, ¿donde quedan los grandes gallegos (y contemplo a Casa Marcelo como irreprochable excepción, pues ofrece algo único y diferente a todos) al lado de otros grandes con rangos de precio que pagan la gasolina desde León -p. ej.-, como el Culler de Pau, o A Estación (con precios inamovibles hasta mi última visita), o Maruja Limón o el por algunos incomprendido, Casa de Comestibles?, por citar algunos conocidos.
En fin, que me pongo a largar y no paro; pero id a Casa Solla; que no os arrepetiréis de probar un menú que ,como pocos, por largo no está desestructurado y es capaz de ofrecer un ritmo ascendente también en cantidad. Quiero decir con esto que los platos principales, son los más grandes, lo cual se me antoja preferible a rematar con un minibocado de pescado o carne. ¡Lo mejor para el finaaal!!!
cada dia me metes en mas ganas de probar todos esos templos gallegos de la cocina.
ResponderEliminartodo se andara, todo
poco a poco
un saludo
Como siempre acaba uno teniendo en la boca sensacion de haber probado alguno de esos platos. Y pensar que en su momento reserve alli y no pude ir!!!
ResponderEliminarNo se que ha sucedido, pues había escrito un comentario en Respuesta al sr. López, además de adelantar que posiblemente, viendo que ya nadie me da la brasa con el tema y puedo decir eso de "salió de mis adentros"; decapitaré el nombre del blopara despojarlo del apellido pelín chorras con el que lo he bautizado.
ResponderEliminarEn fin, Antonio, copio frase a J.M.J. de CDC (esto ya parece de espías rusos) de un tal Kundera "La mejor velocidad que conduce a los placeres, es la que va más despacio".
Pachi; graciñas tio, de veras. Sigue disfrutando con lo mio y sobre todo, con lo tuyo.
Saludos.
Jolines, Danind. He tenido que hacer como Pulgarcito: tirar miguitas de pan para no perderme. A veces eres más denso que la fabada de la abuela litoral.
ResponderEliminarNo me queda claro si Solla es un restaurante, un auditorio o una cafetería. Con tanto capuchino circulando por el menú solo falta pedir una napolitana y...hala! a desayunar.
Es lógico que Pepe te conozca. Si ya entras levitando, ligero, cual pequeño discípulo de Gandhi, el reconocimiento tiene que ser inmediato. Ten cuidado con los vuelos, no vaya a ser que un día acabes estampado en el techo.
En cuanto a tu masturbatoria crónica, he de decir que eyaculas más que Bukowsky con sus "Mujeres". Y si bien el Follonero admira la cocina de Pepe, también piensa que en ese menú (en concreto) hay mucha fanfarria y poco producto de temporada. Otra cosa: decir que Pepe y su vieira son más sólidos es tener un concepto algo extraño de la solidez.
Y una última cosa, querido Danind. Espero que eso de "un tal Kundera" hay sido un lapsus. De lo contrario el Follonero tiene que volver a suspenderte: esta vez en literatura extranjera del siglo XX.
Atentamente. El Follonero
FollonerO:
ResponderEliminarEntre Bukowski (que manía de ponerlo con "y", a ver si nos vamos a ver los dos en septiembre) y Terry Gillian me ha quedado la entradita, de densa, larga y caótica.
Como siempre Follonero en tu linea de "una de cal y otra de arena", yo también creo que un algo de fanfarria ha siso sobrante en el menú; pero no hay que restar valor al disfrute de lo que no lo es.
El lo tocante a tu colega (el molusco bivalvo de Raxó), ¿que tienes de objeción contra el local, o el personal de sala, o los precios -mas recatados que en Solla-? y si, la cocina sin llegar a nivel Joël Robuchon, pero es regular en su standart. A veces, la solidez es tener una idea de con que te vas a topar a la hora de efectuar una reserva.
Por último y para que continues animado, te adelanto que tengo en mi manga un trio de ases, que pueden ser el no va más de mis crónicas masturbatorias.
Tu levitante cronista, se despide hasta nueva intervención.
P.D: No has entrado en la casilla Grandesrestaurantes VS Grandesrestaurantes a buen precio, que es donde deberías haber encauzado el raudal creativo que te caracteriza
para aumentear mi conocimiento; que no ando con ganas de literatura ni de telediarios.
El menú tiene buena pinta pero el precio se antoja a todas luces excesivo. Los productos son en su mayoría de bajo coste y aunque entiendo lo complicado de su elaboración me parece una exageración pagar 85€ por productos de esa categoría y a las afueras de una pequeña ciudad. Seguro que está buenísimo pero parece que están subiendo los precios para convencer más a los inspectores de la guía francesa.
ResponderEliminarAnónimo, esos 85 €, es un precio elevado, pero no sé si tajantemente excesivo.
ResponderEliminarEn mi caso seguro que no, por que el plato extra hace cumplir con creces el valor intrínseco de un menú, que como he dicho, se escolta de un importante número de entrantes y pettit fours, entre los que se encuentra alguna virguería.
Ya he comentado el hecho de que he encontrado sitios que, a mi parecer, son superiores en calidad/precio; pero en Solla se agradece la carencia de ciertos trucos.
Te pongo un ejemplo; imagínate ese menú a 75€,
más 5€ (en peores plazas he toreado) en concepto de pan, agua y servicio y que a las 22:00 deje de existir la posibilidad de que te lo sirvan. Sería uno de tantos menús disfrazados, con desagradable sorpresa final.
Tampoco creas que mi opinión es tajantemente contraria a la tuya. Otro ejemplo;
Pedro Roca y su menú degustación a 60€, que incluye todo y más (trufa blanca, marisco, setas de temporada, caza... con todo de primera y en muuucha cantidad), en el centro de Santiago, dejan al arriba relatado en pero lugar, a todas luces.
Es más, como este comentario ya se ha convertido en un irremediable tocho; añadiré que en este último se dispone de una gran bodega, muy buen servicio del vino y te hacen sentir de de super bien para arriba.
Lo he posteado y es de lo poco, de recomendada lectura que he escrito.
Gracias por dejar tu opinión, un saludo.
Boas, desculpa, pero penso que tés unha pequena gran sobredose de blogues gastronómicos, ti de maior queres se-lo gourmet de provincias, pero aínda estás no preescolar: non sabes nin escribir ben (palabras rebuscadas, e, menos mal que o admites, pallas mentais a tope). Non sei os anos que terás, pero aínda che queda moito por medrar pra conseguir ter un blogue que mereza a pena ler. Que Pepe Vieira non tén consistencia? Era o que me faltaba... Se non sabes comer, non teñas un blogue gastronómico. Un saúdo. Rafael Blanco.
ResponderEliminarRafael Blanco, era o que me faltaba; que chegaras ti a decirme ó que podo aspirar, ou deixar de aspirar con isto de ter un blogue.
ResponderEliminarXa teño os meus anos e de maior non quero ser ninguén que non esté a ser xa.
Ademais, polo que dis, non se me da ben o de escribir; fágoche saber que non cobro por facer isto, non é a miña profesión e non é preciso dispoñer de titulación algunha. Pero ti, ¿sabes ler?; eu non escribin que a Pepe Vieira lle faltase "consistencia"; ó contrario, manifestei que garantía unha maior "solidez" en certos aspectos, fronte ó que pensaba algún lector (cousa que é libre de crer, pódese opinar sen faltar ó respeto).
Por último, como vexo que coñeces blogs mellores, anímote a que des unha voltiña polos mesmos e deixes de enviar comentarios que non aportan nada en absoluto, neste en concreto.
Así mesmo, se che arde o cu por insultarme, dispós de unha direccion de correo picando no meu perfil. De ese modo non amolarás aos lectrores que si saben ler.
Deica,
Ahí, kerido Danind. Buena respuesta, duro y al estómago (nunca mejor dicho). Desde hoy serás Danin Tyson. Te confieso que El Follonero tiene miedo...será atizado tan duramente como al Sr. Blanco? Espero que no; en el fondo sabes que el Follonero te aprecia, Danind Alí.
ResponderEliminarEs lo malo de tener un blogue; que se cuelan blogueros, ora disfrazados de Robuchon ora travestidos de Anxo Quintana, y confunden las cosas. El Follonero está apenado ya que has sido atizado por un comentario suyo sobre Pepe Vieira. Así que como penitencia hoy cenaré este hermoso molusco acompañado de un buen Ribeiro y de mi Follonera.
Como te pones por una Y, Danin Foreman. No creo que el amigo Charles me condenase por ello. Pero acepto el error. No me queda otra, no vaya a ser que reciba un uperccut en la quijada.
PD: Si te parece dejamos el debate sobre Grandesrestaurantes VS Grandesrestaurantes a buen precio para el siguiente post. Éste anda ya un poco saturado.
Atentamente. El Follonero
Follonero, no dudes que, si lo veo necesario, también te daré lo tuyo, aunque para ello tenga que asirme a una "y" ardiendo.
ResponderEliminarNo obstante, no estés apenado, tu sentido del humor es bien recibido por aquí y he de reconocer que estás amparado de mejor gusto que ciertos travestidos que pululan por ahí.
Lo que nadie debe olvidar, es que aquí se cuela quien yo quiero que se cuele y se expone a recibir besos y abrazos, o estopa linda si el autor lo considera necesario.
Sirva esto para aclarar a ciertos indeseables que si no se publican sus comentarios, NO es por error.
Observo que al igual que a Miles Davis, eres aficionado al boxeo. Yo soy más de tenis, cada uno en su campo y sin tocarse; pero me permito
recomendarte al anteriormente mencionado, célebre trompetista, como fondo musical de tu cena con doña Follonera y desearos de paso, buen provecho.
Por último, el VS propuesto está sobado, pero no aclarado, por lo que aún comprendiendo que te de pereza, quedas a deberme una por no arrojar luz sobre el tema.
Atentamente. ¡DI MI NOMBRE, DI MI NOMBRE!!! :)
Hola ,Danin.Antetodo , ti adiante co blogue...las polémicas siempre dan vidilla y entre Follonero y Rafael Blanco esto se pone interesante.Al Sr. Blanco ni caso , que haga él un blogue a ver si domina el arte de la literatura gastronómica , la ortografía perfecta y la capacidad de síntesis.
ResponderEliminarYo con Solla (y no es el único) ,ya lo he dicho y respaldo a Anónimo, no acabo de entenderme , materia de bajo coste , personal becario , a saber sino pagan los pobres por aprender ,local propio , apoyo institucional...como ama de casa no me salen las cuentas.Estás pagando al artista , claro.Cierto que es muy bueno , aun así...qué carito.
Otra nota no referida a Solla ,sino comentario general ,estoy del asuntito de los petit fours algo cansada.De verdad es tan importante????
Hola Anonim@, gracias por el apoyo. A lo que comentas no se que decirte, sin largar la biblia en verso, o en prosa, que ya me cuesta bastante sin tener que rimar (evítense tecnicismos de asonancias) jejejeje...
ResponderEliminarYa se sabe que mi fuerte no es la expresión literaria y que peor de lo que me llevo con el teclado, es mi destreza con la cámara; pero esto no es una guía profesional, ni se cobra un duro; por lo que me alegro de gente como tu lo comprenda.
Básicamente estoy de acuerdo con lo que comentas de Solla, que como bien dices, es extensible a muchos otros; pero sería injusto decir que sólo pagas al artista, pues hay muchos factores para que la cuenta me salga a pagar a gusto.
En cuanto a los petit, a veces se encuentran joyas de por medio, a veces, el mejor dulce de la comida y otras puede que si sobren. Algunos de mis favoritos no suelen poner pettit fours; pero a mi se me antojan de igual importancia que el aperitivo de la casa.
Pásate cuando quieras, se avecinan post sobre restaurantes de enorme nivel.
Un saludo.
Me veo obligado a hacer la tontería de saludar a los lectores desde asturias, aunque sólo sea para subir de 13 comentarios.
ResponderEliminar:)
En primer lugar , leo de vez en cuando este blog, no he ido a todos los restaurantes que aqui se citan, pero de los que he ido he sacado conclusiones muy parecidas , sobre todo en A Coruña que es donde yo vivo, es un blog bastante independiente no obedece a razones partidistas como otros , Rafael Blanco parece ser que esta a favor de la no independencia de los blogs , hay que tragar con lo que nos dicen sobre todo el que el comenta.
ResponderEliminarEnhorabuena por su blog libre Daninland.
Antón Miranda
Muchas gracias sr. Miranda, por los halagos y por no ser partidista, pero si partidario del disfrute.
ResponderEliminarYo disfruto en los restuarantes y si escribo lo que escribo, es para animar que otros disfrutéis tanto como yo; por eso,si es necesario, se dice lo que ha costado una cuenta, y se manifiestan opiniones con el mayor grado de libertad posible.
De este modo, todos los interesados aprenderemos algo; pues yo soy el primero que necesita y quiere aprender.
Un saludo.
Aprovecho para recalcar que el producto utilizado para este menú si goza de calidad, temporada, es regional y amparado por la mayor de las calidades en prácticamente todas las elaboraciones.
ResponderEliminarEs mi opinión; un saludo a todos los lectores.